La práctica de ejercicio físico es una estrategia importante dentro del tratamiento multidisciplinar (farmacología, fisioterapia, psicología...) en pacientes con fibromialgia. El objetivo de este texto es guíar a las personas con fibromialgia para realizar una actividad física adecuada y acorde a su sintomatología.
El ejercicio físico se considera una de las principales estrategias en el manejo de las enfermedades crónicas. Existen evidencias científicas que demuestran que la actividad física ayuda a evitar el círculo vicioso entre el dolor, los trastornos psicológicos y la inactividad comunes en este síndrome. También mejora la calidad de sueño, otorga numerosos beneficios en el bienestar psicológico (mejora el estado de ánimo, el bienestar o la autoeficiencia, reduce la ansiedad y la depresión...), mejora la calidad de vida, mejora la capacidad cardiorrespiratoria, la capacidad muscular, la flexibilidad y la amplitud de movimiento...
¿Que tipo de actividad física es la más recomendable?
Algunas recomendaciones basadas en la evidencia y en la opinión de expertos en fibromialgia sugieren programas de entrenamiento aeróbico, fortalecimiento muscular y flexibilidad, ya sea individual o combinado.
Programas de ejercicio aeróbico que han demostrado ser beneficiosos en la fibromialgia:
- Ejercico físico regular de bajo impacto mecánico (taichí, yoga, caminatas, ejercicios en el agua) (60-75% Fc max, 30 min, 3 veces a la semana)
- El tipo de ejercicio, duración frecuencia e intensidad influyen en la mejora del dolor corporal en pac con FM.
- Beneficios: mejoría en el dolor, bienestar psicológico, incremento de la resistencia, mejora en capacidad funcional y movilidad.
- ·Dato interesante: El ejercicio aeróbico regular con intensidad moderada no ha mostrado efectos adversos evidentes
- Grado de evidencia de estos estudios: Moderado
Programas de ejercicios de fortalecimiento:
- Entrenamiento progresivo de la fuerza 2 veces a la semana (comenzando 40-60% hasta 60-80% repetición máxima)
- Beneficios: incrementa la fuerza máxima, mejora la actividad electromiográfica, no incrementa los síntomas
- Precauciones: programas de alta intensidad, abuso de ejercicios excéntricos o isométricos pueden agravar los síntomas
Programas de ejercicios de flexibilidad:
- 2-3 veces a la semana
- Beneficios: incremento de la flexibilidad
- Tener en cuenta: Son necesarios mas estudios
Como ya se ha citado anteriormente, es interesante realizar programas de ejercicio combinado (ejercicio aeróbico + ejercicio fuerza + ejercicio flexibilidad):
Algunas recomendaciones:
- Se recomienda iniciar con una intensidad baja y aumentarla gradualmente (en general, el ejercicio al 60-75% de la FC max es bien tolerado).
- Es recomendable realizar pausas frecuentes pero cortas entre los diferentes ejercicios.
- La frecuencia debería ser 2-3 días por semana.
- Al igual que la intensidad la duración del ejercicio debería de empezar siendo corto e ir progresando (30 min como mínimo).
- El paciente debe ser consciente que a corto plazo puede aumentar el dolor y la fatiga
Si tienes fibromialgia y estás pensando iniciar alguna actividad física te recomendamos que te pongas en contacto con profesionales sanitarios o preparadores físicos especializados que puedan individualizar tu programa y establecer consideraciones especiales en función de tu sintomatología y nivel inicial de tus capacidades.
Información obtenida de la Revista Andaluza de Medicina del Deporte (2010). "Evidencias para la prescripción de ejercicio físico en pacientes con fibromialgia".